Deportes
El día que cambió el béisbol profesional dominicano
«Lo único que nos llevaremos de esta vida, es la cantidad de amor que fuimos capaces de dar» Anónimo
A las Series de Campeonatos de Grandes Ligas edición 2024 que protagonizan Cleveland-Yanquis y Mets-Dodgers, a partir de hoy a la afición dominicana les servimos en la mesa el plato fuerte de nuestra pelota otoño-invernal, con seis campeones que defienden con uña y dientes el imperio de sus territorios.
Tigres del Licey, Águilas Cibaeñas, Leones del Escogido, Gigantes del Cibao, Estrellas Orientales y Toros del Este nos darán una amalgama de buen béisbol que nos subirá cada día la bilirrubina de la pasión, la cuerda, los memes y el jupeo. Jamás olviden que la «madre del play» no debe ser tocada.
Y hoy 16 de octubre, es un día muy especial para la libertad patronal de la pelota profesional, ya que recibieron de parte del gobierno de Rafael Leónidas Trujillo la patente que les permitía operar como empresas de libre comercio.
Hoy se cumplen 71 años de que las franquicias de Licey, Escogido, Águilas y Estrellas recibieron las licencias que les permitía realizar operaciones comerciales. Este permiso se emitió el 16 de octubre de 1953 por el Poder Ejecutivo, donde además se dictó por primera vez un reglamento oficial para sentar las pautas del béisbol profesional en la República Dominicana.
Con esta licencia a los cuatro equipos tradicionales se daba un salto de calidad del béisbol romántico de verano de La Normal, al béisbol profesional con luces de otoño-invernal. Los presidentes históricos que recibieron esas licencias fueron Ignacio Guerra (Licey), Francisco Martínez Alba (Escogido), Restituto González (Águilas) y Rafael Antún (Estrellas).
En 1954, operando como empresas comerciales, con todas las de la ley, inauguran la cuarta y última justa veraniega que se puso en marcha el sábado 15 de mayo de 1954.
Los responsables del montaje fueron el director General de Deportes, Juan I. Vicioso y la Comisión Nacional de Béisbol Profesional presidida por Manuel Vicente Feliú, con los doctores Rodolfo Bonetti Burgos y Gilberto Morillo Soto, miembros.
Este último campeonato de verano fue ganado por las Estrellas Orientales, piloteadas por el profesor Ramón Bragaña, derrotando en cinco juegos al Licey con el partido de cierre en San Pedro de Macorís, el 29 de agosto de 1954.
En La Normal, el único equipo que no logró ceñirse la corona de campeón fue el Escogido, pero novela cambió a partir del primer torneo otoño-invernal 1955-56.
Escrito por Bienvenido Rojas para Diario Libre
