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Conflictos viales en el residencial Cuesta Brava podría alcanzar niveles peligrosos
Santo Domingo, 7 de enero del 2024.-Conductores de la carretera La Isabela y diversas organizaciones comunitarias han denunciado la persistente obstrucción del tránsito en el interior del residencial Cuesta Brava por parte de la Junta de Vecinos, a pesar de la sentencia de la Segunda Sala de la Cámara Civil y Comercial del Juzgado de Primera Instancia.
Los denunciantes indican que la sentencia prohíbe el cierre y ordena la demolición de las garitas erigidas con ese propósito.
Informan que la situación ha desencadenado taponamientos de varios kilómetros, desencuentros frecuentes entre los usuarios de la vía y la seguridad del residencial, y el temor de que las disputas alcancen niveles peligrosos, incluso con la aparición de armas de fuego.
Además del cierre ilegal, los conductores señalan la presencia de más de una docena de "policías acostados" en la calle interior del residencial, ralentizando la movilidad vehicular y contribuyendo al congestionamiento del tránsito.
El residencial Cuesta Brava, originalmente diseñado con tres calles para aliviar el tránsito, ha cerrado esas vías, impidiendo el acceso a no residentes.
Recordaron la sentencia 883-2009 del 21 de octubre de 2009, que ordena la demolición de las garitas obstructoras en las calles Ercilia Pepín y Salomé Ureña, ubicadas en el noroeste de la capital.
Los afectados expresan su preocupación por la decisión de cerrar nuevamente el paso a cientos de vehículos provenientes de sectores cercanos como Puerta de Hierro y Buena Vista.
Indican que esta medida está generando inconvenientes diversos, desde largos tiempos de espera hasta intranquilidad entre los usuarios que buscan llegar a sus lugares de trabajo.
El residencial Cuesta Brava, originalmente diseñado con tres calles para aliviar el tránsito, ha cerrado esas vías, impidiendo el acceso a no residentes.
