Santo Domingo. – El Centro de Operaciones de Emergencias (COE) de la República Dominicana ha elevado y extendido las alertas de seguridad en varias provincias ante el inicio de la temporada convectiva, que trae consigo un aumento significativo en las precipitaciones. Según el último informe de la Oficina Nacional de Meteorología (ONAMET), se espera que las lluvias se intensifiquen y persistan durante los próximos días, afectando principalmente a regiones del norte y centro del país.

Durante una rueda de prensa, las autoridades anunciaron que las provincias de La Vega, Sánchez Ramírez, Monseñor Nouel, Monte Plata, Puerto Plata, Santiago y Samaná se encuentran bajo alerta amarilla. Mientras tanto, el Distrito Nacional y otras ocho provincias han sido colocadas en alerta verde, lo que indica un nivel de riesgo moderado.

El mayor general (R) Juan Manuel Méndez, director del COE, hizo un llamado a los residentes en zonas de alto riesgo a permanecer alertas y evitar cruzar ríos, arroyos y cañadas con altos volúmenes de agua. "Nos encontramos en sesión permanente y hemos activado los planes de contingencia con la colaboración de múltiples instituciones, incluidas las Fuerzas Armadas, la Defensa Civil, el Cuerpo de Bomberos y el Ministerio de Obras Públicas, para responder de manera efectiva a cualquier emergencia que pueda surgir", afirmó Méndez.

Gloria Ceballos, directora de la ONAMET, destacó que la combinación de altas temperaturas, humedad y efectos meteorológicos locales contribuye a la formación de nubes de gran desarrollo vertical, que son capaces de generar lluvias torrenciales, tormentas eléctricas y ráfagas de viento. "Las previsiones indican que las lluvias de mayo estarán por encima de lo normal, lo cual es preocupante dado que los suelos ya están saturados por las precipitaciones anteriores", explicó Ceballos.

Por su parte, Fausto Colón, representante del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI), informó sobre las medidas preventivas en las presas, especialmente en la de Taveras. "Hemos comenzado a turbinar 50 metros cúbicos de agua desde el mediodía para gestionar los niveles y prevenir desbordamientos. Es crucial que las comunidades río abajo estén informadas y preparadas para cambios en los niveles del agua", señaló Colón.

Esta intensificación de la vigilancia y las medidas preventivas se toman en un momento crítico para la región, que se enfrenta a una temporada de lluvias potencialmente severa. El COE y sus instituciones afiliadas continúan monitoreando de cerca la situación y están preparados para actuar en defensa de la población y sus bienes ante cualquier eventualidad climática.

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