Santo Domingo.- El gobierno canadiense anunció este jueves la imposición de nuevas sanciones contra tres destacadas figuras del sector empresarial haitiano: Marc Antoine Acra, Carl Braun y Jean-Marie Vorbe, debido a sus supuestos vínculos con actos de corrupción. Estas medidas se enmarcan en el reglamento sobre medidas económicas especiales destinadas a Haití, que tiene como objetivo hacer frente a la corrupción masiva que alimenta la actual crisis en el país caribeño, ya sea en términos de seguridad, política o humanitaria.

La ministra de Asuntos Exteriores canadiense, Mélanie Joly, subrayó la necesidad de estas sanciones reforzadas como parte de la lucha contra la corrupción endémica y sus devastadoras consecuencias en Haití. En virtud de la Ley de Inmigración y Protección de los Refugiados de Canadá, Marc Antoine Acra, Carl Braun y Jean-Marie Vorbe tienen prohibida la entrada en territorio canadiense. Además, el gobierno canadiense ha establecido una prohibición general en todas las transacciones que involucren a estos individuos.

El comunicado oficial del gobierno canadiense expone que estas sanciones se basan en pruebas sólidas que demuestran que estas personas contribuyen activamente al deterioro de la violencia y la inestabilidad en Haití, al participar en actos de corrupción y otras actividades criminales. Además, facilitan las operaciones ilegales de bandas armadas que amenazan a la población haitiana y la paz y seguridad del país.

Canadá reafirma su compromiso en apoyar todos los esfuerzos destinados a abordar la actual crisis multidimensional en Haití, implementando medidas para responder a las urgentes necesidades de la población haitiana.

Es importante destacar que Canadá ha tomado medidas similares al sancionar a casi una veintena de figuras haitianas por su presunta implicación en casos de corrupción o por su apoyo a actividades de bandas armadas en Haití. Entre los sancionados se encuentran ex diputados, senadores, presidentes, primeros ministros, ministros y personalidades del mundo empresarial. Esta última acción demuestra el compromiso de Canadá en desempeñar un papel activo en la búsqueda de soluciones a los profundos problemas que afectan actualmente a Haití y en promover un entorno político, económico y de seguridad más estable para el país y su pueblo.

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