Liberan al empresario y periodista Johan Rosario
SANTIAGO, R.D.-Fue dejado en libertad el empresario, periodista y escritor Johan Rosario, quien había sido apresado de manera irregular por un supuesto caso de difamación e injuria interpuesto por su exesposa.
La libertad pura y simple le fue concedida luego de que una jueza de Atención Permanente del Palacio de Justicia de Santiago considerara improcedentes las acusaciones presentadas en su contra.
El apresamiento del comunicador despertó indignación entre familiares, amigos y ciudadanos, quienes resaltaron su trayectoria intachable y su compromiso inquebrantable con la solidaridad y las causas humanas.
Durante la audiencia, decenas de personas acudieron al Palacio de Justicia de Santiago a expresar su apoyo, calificando la detención como un acto de abuso y de malas intenciones.
“Queremos justicia para Johan Rosario”, clamaban sus allegados, recordando que el periodista es un hombre de corazón noble, dedicado por años a ayudar a los más necesitados sin pedir nada a cambio.
“A los que hacen el bien no se les destruye, se les honra”, afirmaron visiblemente conmovidos sus compañeros de trabajo.
La detención se basó en una supuesta orden de alejamiento emitida en 2022, la cual, según documentos y testimonios, habría sido incumplida por la propia denunciante, quien visitaba con frecuencia la residencia de Johan Rosario, compartiendo cenas, cumpleaños y encuentros familiares.
El peso del bien frente a la sombra del daño
Quienes conocen a Johan lo describen como un alma limpia, de mirada serena y manos abiertas, capaz de tender puentes donde otros levantan muros.
Su labor social trasciende las palabras: más de treinta empleados directos y decenas de colaboradores indirectos dependen de sus empresas; además, donaciones mensuales superiores a 1.2 millones de pesos sostienen proyectos humanitarios en comunidades vulnerables de la República Dominicana y de los Estados Unidos.
Por eso, la noticia de su apresamiento cayó como una herida abierta en el corazón de Tamboril.
“El bien que Johan ha hecho habla más fuerte que cualquier mentira”, expresó un vecino entre lágrimas.
En las calles, en las redes, y en los corazones de muchos, se repite un mismo eco:
“El pueblo sabe quién es Johan Rosario. La verdad camina con él.”
Su gente, la misma que ha sentido su mano amiga en los momentos más oscuros, exige respeto por su nombre y su humanidad.
“Un hombre íntegro, de valores y corazón solidario, no merece el daño que la maldad intenta imponer”, expresaron representantes comunitarios.


















































