UNESCO declara el casabe Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad
Santo Domingo.- La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) ha declarado oficialmente los conocimientos y prácticas tradicionales para la elaboración y consumo del casabe como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Este reconocimiento, resultado de una candidatura conjunta de República Dominicana, Cuba, Haití, Honduras y Venezuela, fue anunciado durante la decimonovena sesión del Comité Intergubernamental para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial, celebrada en Asunción, Paraguay.
El casabe, pan elaborado a partir de la yuca amarga, simboliza un legado que mezcla tradiciones indígenas y africanas, transmitido tanto de manera informal en los hogares como a través de la educación formal en escuelas. Según la UNESCO, este alimento milenario promueve la cohesión social, el respeto mutuo y la unidad, mientras contribuye a la seguridad alimentaria y al sustento económico de miles de familias en la región del Caribe.
El comité destacó el rol del casabe en la preservación de la paz y el diálogo entre comunidades, subrayando su importancia como símbolo de identidad cultural. Este alimento, que ha perdurado sin alteraciones significativas a lo largo de los siglos, representa una conexión tangible con los orígenes históricos y sociales de los habitantes del Caribe.
Milagros Germán, ministra de Cultura de la República Dominicana, lideró una delegación que viajó a Paraguay para apoyar esta candidatura. Durante su intervención, Germán resaltó que la elaboración del casabe no solo es un reflejo de la herencia taína, sino también un puente entre generaciones que preserva valores esenciales para las comunidades caribeñas.
La preparación del expediente fue un esfuerzo colectivo entre los cinco países, que realizaron reuniones técnicas para presentar una propuesta sólida. Estas acciones incluyeron conversatorios y degustaciones de variedades típicas del casabe, con el fin de difundir su importancia cultural y gastronómica.
En el acto de reconocimiento, la casabera dominicana Cándida Castillo, de Monción, expresó su orgullo por este logro, afirmando que cada mordisco de casabe evoca el espíritu de los antepasados taínos. Por su parte, Mariela Sepúlveda, representante de Villa Mella, destacó que la declaración es un eco del legado ancestral que fortalece las tradiciones culinarias de la región.
Con esta inscripción, la República Dominicana suma un nuevo elemento a la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO, que ya incluye manifestaciones como el Teatro Cocolo Danzante, la Cofradía de los Congos de Villa Mella, el merengue y la bachata.
La decisión refuerza el compromiso de los países del Caribe con la salvaguardia de sus tradiciones, al tiempo que pone en valor la riqueza cultural de la región a nivel global.
Este reconocimiento no solo celebra el casabe como alimento, sino también como un símbolo de la historia compartida, la resiliencia y la creatividad de los pueblos caribeños.