Gilbert Gómez destaca que su equipo nunca desistió y reconoce a su rival
El mánager de los Tigres del Licey, Gilbert Gómez destacó el valor de su equipo al nunca rendirse en la Serie Final que ganaron en siete partidos a las Estrellas Orientales la noche de este sábado en el Estadio Tetelo Vargas.
“Uno está sin palabras”, dijo Gómez entre sus primeras palabras tras la corona azul. “Realmente Dios pone a uno en situaciones que uno no entiende, pero lo más importante del triunfo es agradecerle”.
Los Tigres ganaron la final con un resultado 3-2 sobre las Estrellas, un triunfo como visitantes.
Gómez, quien comenzó a dirigir a los Tigres cuando restaban solo seis de los 50 partidos de la ronda regular, al reemplazar a José Offerman, destacó los valores intangibles de su equipo para conquistar la corona.
“Primeramente nunca desistir”, dijo el joven entrenador. “Y la confianza que pusimos en Dios”, pero además la “confianza, profundidad y el equipo nunca se rindió, nosotros sabíamos que teníamos lo que necesitábamos para lograrlo”.
El capataz azul es el mánager más joven en ganr una corona en la historia de la Liga de Béisbol Profesional y desplaza al actual gerente del equipo, Audo Vicente. “Esto es una bendición de Dios. Dios es bueno”.
Dedicó su triunfo a toda su familia, su esposa e hija, por sus padres, al igual que sus hermanos, que también están ligados al béisbol.
Las Estrellas, que finalizaron en el segundo puesto de la serie regular y líderes del Round Robin mostraron su calidad en esta final. Ganaron los dos primeros partidos y cuando enfrentaron la eliminación el viernes en el Estadio Quisqueya Juan Marichal, hogar de los dos veces campeones, entonces forzaron al séptimo partido.
“Nosotros sabíamos que para ganarle a este equipo teníamos que hacerle el out 27”, dijo Gómez. “Es un equipo que desde el principio de la temporada (contó) con mucho talento, mucha gallardía y realmente mi respeto para esa franquicia que muchos también dieron como que no era favorito ni siquiera para pasar al Round Robin al principio de la temporada, pero estuvieron en el juego 7 y aquí gracias a Dios nosotros salimos victoriosos”.
El Licey se vio 0-2 en la Serie Final y regresaron para ganar los siguientes tres, perder en el sexto compromiso y salir con la corona en el séptimo juego. “Cuando confías en tu equipo y sabes que puedes lograrlo, la idea es ir uno a uno, pitcheo a pitcheo, turno a turno, momento a momento y nunca perdimos el norte de lo que queríamos lograr que era con el pitcheo ganar un inning a la vez”.