La Fundación Eduardo León Jimenes y el Jardín Botánico Nacional relanzaron el Pabellón de Helechos María Asensio Vda. León. El renovado espacio tiene un nuevo recorrido pedagógico, acceso adaptado para visitantes con movilidad reducida, videos en lengua de señas dominicana y audios descriptivos para personas con discapacidad visual.

El Pabellón de Helechos, ubicado en la salida noreste de la primera rotonda del Jardín Botánico Nacional, contiene más de 30 especies nativas, introducidas y endémicas, exhibidas en cinco mil metros cuadrados dedicados a la preservación, el estudio y la divulgación de las características especiales de las pteridófitas.

María Amalia León, presidente de la Fundación León Jimenes, recordó a su abuela María Asensio Vda. León, quien fue una amante y cultura de los helechos y cuya colección personal fue donada por sus hijos al Jardín Botánico Nacional luego de su fallecimiento.

“Los hermanos León Asensio rindieron tributo a la memoria de su madre con la donación del Pabellón que alojó su colección de helechos, y nosotros como Fundación hemos renovado este espacio haciéndolo más accesible y amigable para todos los visitantes que deseen disfrutar de esta colección viva que con tanta pasión y esmero cuidó nuestra abuelita Mayún”, comentó la doctora León.

Pedro Suárez, director general del Jardín Botánico Nacional, expresó su gratitud a la fundación, como un ejemplo de colaboración con instituciones aliadas para seguir trabajando en la conservación de la flora de la Isla. “Este espacio estará enfocado principalmente en dos de los ejes fundamentales por los que se rige la institución: educación ambiental y recreación”, puntualizó Suárez.

El acto de reinauguración contó con la presencia de Carolina Mejía, alcaldesa del Distrito Nacional; José Elías Gonzalez, viceministro de Recursos Forestales; María Amalia León, presidente de la Fundación; Pedro Suárez, director del Jardín Botánico y Francina Lama, presidente del Voluntariado del Jardín Botánico.

El proyecto de remozamiento fue dirigido por Alex Martínez Suárez, quien, junto a Otniel de Moya, estuvieron a cargo el diseño arquitectónico y paisajístico de este espacio. La nueva exposición titulada “El Hecho de ser Helechos”, es curada por Rab Messina en su concepto, investigación y textos. La traducción visual de la señalética ha sido diseñada por Ivanna Candelier.

Este proyecto arquitectónico, así como el mantenimiento del espacio y las especies de helechos que en él habitan, han sido auspiciados por la Fundación Eduardo León Jimenes.

Este espacio tuvo su origen el 5 de marzo de 1980 cuando, cuatro años después del fallecimiento de Doña Mayún, sus hijos donaron en su memoria el primer Pabellón de Helechos.Localizado originalmente en el camino hacia la Gran Cañada y reubicado hace 20 años en el lugar actual, la Fundación León Jimenes realiza un remozamiento agregándole un nuevo recorrido didáctico, la remodelación del salón de eventos disponible para celebración de actividades, zonas de descanso para visitantes, y baños adecuados para el uso de personas con movilidad reducida.Entre los atractivos del Pabellón de Helechos encontramos expuesta la única especie nativa de nuestra isla, Goniopteris fuertesii, descubierta como parte de la investigación científica por el equipo de especialistas del Jardín Botánico Nacional.

La exposición lleva el título de “El Hecho de ser Helechos”, para la cual fueron escogidas 12 especies que forman parte de este recorrido. Está pensada para entretener, enseñar y mostrar a los helechos de forma distinta.

El recorrido dispone de videos en lengua de señas dominicana y audio descriptivo en castellano para los visitantes con discapacidad visual y auditiva. Además, los asistentes al Pabellón de Helechos podrán disfrutar de la música ambiental de Emisora Raíces en todas sus áreas.

“El Jardín Botánico Nacional es como un museo para estudiosos de las plantas: es el lugar donde se encuentran reunidas nuestras riquezas vegetales para que los expertos puedan preservarlas, estudiarlas y difundir públicamente sus hallazgos. Por eso, al igual que un museo pone en valor a sus colecciones, pensamos en hacer una exposición no para especialistas, sino para los públicos amplios y variados que utilizan este remanso verde como un espacio de esparcimiento y aprendizaje”, comento María Amalia León.

FUENTE: https://elsoldesantiago.com